Era un fin de semana de agosto había llovido mucho. Era de esas lluvias que hacen pequeños ríos en Buenos aires. Sin embargo, eso no pudo evitar que Julián salga. Termino de hacer las cosas en su casa, charló un rato con su hermana y mientras todo eso sucedía por dentro habia una llama encendida con ganas de expandirse hacia otro lugar. Asique siguió. Caminó, se encontró con una amiga y su bebe hasta que llegaron a una zona de Palermo. Allí se encontraron con unas personas y de ahí fueron a un bar que estaba frente al inundado mástil. El bar se encontraba en un pasillo como el de una galería, pero de bares. Y allí estuvo Julian toda la noche charlando con una trava. Música de fondo, una persona que animaba y otrras dando vueltas por ahí. Había un bebé que dormia mientras su madre charlaba con la que atendía la barra -Linda mujer por cierto- ella nos servía coca cola y no nos quiso cobrar nada. Era una noche de esas que te sentís a gusto. Pero como todo, tambien comenzó a terminar. De a poco la música bajó, fueron guardando todo y bajaron las persianas. Allí quedó Julián con la prima, la bebé y su madre. Miraron para todos lados y se encontraba todo cerrado y ahora qué hacemos, se preguntaron, no conocemos la zona. Intentaban recordar como habían llegado hasta allí y de esa manera llegaron a la plaza donde se encontraba el mastil. Allí había otra galería donde otras trabas les estaban esperando. Se fueron? Les dijeron, recién acaba de llegar el remis para ustedes. Ellos se miraron extrañados. Al parecer las trabas tenían la costumbre de volver siempre en remis y era la cantinera quien se los llamaba cuando cerraba el bar. Era su forma de cuidarlas, para que llegaran bien a destino. No sabía, dijo Julián, vi que cerraron y me dio miedo asique caminamos rápido para acá. No tengas miedo, acá siempre te vamos a cuidar. Mirá, le dijo mientras sacaba un anotador y una lapicera. Empezó a dibujar una especie de estrella y cada trazado tenía un significado. Seguido de eso dibujo un Alcón y dijo: Siempre que veas esto, ahí vamos a estar. No dudes en pedir ayuda si hay algo que necesites. Gracias, le dijo Julián extrañado y con un gesto de felicidad ta grande que no podía hacer que nose notara. Nunca se había sentido tan protegido, tan cuidado. Saludaron y se subieron al remis que ya habían vuelto a llamar las trabas. Llegó a su casa con una sonrisa y fue la noche que más descanso. Al otro día, al levantarse le dice a su padre: estuve en un bar con unas travas, aprendí mucho de ellas, son hermosas . Son prostitutas, respondió su madre. Eso es lo único que te pueden enseñar. No son prostitutas, son travestis y algunas prostituyen su cuerpo porque no les queda otra. Y sí, tmdebién pueden enseñar...
Deja de preguntarle a otros lo que ven sus ojos y empezá a preguntarte qué es lo que ven tus ojos.
Asi estoy
Escribo los errores sabiendo que son de sabios. Me hago consciente de ello y puedo expresarlos
Hoy escribo para mi,
no para él,
ni para ella, ni para vos.
Ya es verano y siento el infierno
Extraño el otoño, no es invierno.
Es así nena, como en una publicidad
Se puede resaltar un aprendizaje o también la estupidez.
Cuál de las dos seréme pregunta
y me pregunto…
No tengo idea, no sé.
Mucho tiempo rodeadx de gente que ni sé.
Y la vida voy construyendo con lo que tengo, con lo que veo, con lo que recibo.
Así pasé la vida, escuchando lo que alrededor pasaba…
Horas y horas. solo ahí, escuchando…
Hasta que al rato dormía y todo eso lo soñaba. Los ruidos, los silencios, las pisadas, los silbidos, las motos, los autos, los gritos. Hay tantas cosas que en ese tiempo rodeaban que dejé de escuchar…
Y me pregunto:
Por qué hay que plantearse un objetivo en la vida?
¿Por qué no se puede simplemente estar?
Por qué sentimos que hay una meta a la que llegar?
Por qué creemos que siempre hay un final resolutivo?
Si nos damos cuenta de la eternidad cada vez que la vemos entre el cielo y el mar.
Podemos simplemente nacer o hacer crecer
Podemos crear y podemos romper Podemos observar o podemos no ver
Te pueden matar o puedes correr.
Y si
Y así andaba en mi niñez,
Buscando sapos para darles de beber. Ellos tenían un ollo no tan profundo en la tierra y mi madre decía que era para refrescarse
Pobrecitos, tienen calor, digo, y ahí nomás a cargar el agua en el vaso para volcar
Días y días con el asunto. Hasta que encuentro un nuevo foco, las hormigas.
Ellas siempre andan en filita, excepto algunas que no saben ni por donde van
Y cargan en sus hombros algún pastito o rama,quizás alguna miga de pan.
El camino es tan interminable que a quien descubrió lo de la reina le llevó miles de años.
Podemos correr las cosas de un lado a otro y también podemos corrernos…
Hagamos lo que hagamos estamos creando un efecto.
Es como cuando nos hicimos caca en el pantalón por primera vez. Uno no se mueve,se queda quieto, no se quiere levantar. De Repente empieza a sentir cosas en su cuerpo. Eso que después llamaron vergüenza. No quiere hablar, no quiere responder…
Hasta que alguien te enseña algo y eso te cambia para siempre.
Tener una casa es tener tu territorio. Es el lugar al que nadie puede entrar excepto que le des el paso. El lugar donde te sientes a resguardo, donde podés oir lo de afuera y no puede afectarte, no puede romperte, no puede quebrarte
Simplemente no puede
Asi es nuestro cuerpo,
Es nuestro territorio, es el que proteje nuestro interior,
el lugar donde nadie puede entrar
excepto que le des el paso.
